¿Has escuchado hablar del árbol de la vida? Seguramente algunos estarán pensando en el árbol donde estaba el fruto prohibido que les marcó la vida a Adán y Eva, otros lo asociarán al árbol genealógico; pero el árbol de la vida va por otro camino, es el árbol que contiene todo lo necesario para hacer de nuestra estadía en el universo la mejor de la experiencia.
Cada una de los conocimientos que necesitamos para vivir lo podemos hallar en un solo lugar, en ese árbol lleno de frondosas hojas de sabiduría, de raíces inquebrantables de nuevos aprendizajes, es un árbol definitivamente necesario.
¿qué es el árbol de la vida?
Para mis estimados lectores que hasta este momento no lo tenían claro, les cuento que el árbol de la vida simbolizó en la mayoría de las culturas el sentido de la vida, es decir, en él se recoge todo lo relacionado con nuestra existencia, con nuestro paso por el universo.
Mientras que en las enseñanzas que están estrechamente ligadas al Oábalah nos dice que el árbol de la vida es donde convergen todas las causas, consecuencias de esta aventura llamada vida.
Desde que somos niños hemos escuchado hablar que nuestro ser supremo se tomó la tarea de crear el mundo en tan solo 7 días, algunos pensarán que fue fácil, pero tiene sus complejidades; dicho proceso que tomó una semana de Dios, está plasmado en el árbol.
Photo credit: Mara ~earth light~ via VisualHunt / CC BY-NC-SA
Cuando hablamos del árbol de la vida tenemos que mentalizar que este nos permite entender y descubrir cada uno de los elementos que conforman nuestra existencia; decidir sumergirse en cada uno de los conocimientos que se recogen en el árbol de la vida es entender las consecuencias, efectos de tan complejo proceso; pero además permite ingresar al conocimiento de todas las causas que surgieron de la creación.
Para todas aquellas personas que estén interesadas en estudiar, explorar cada uno de esos tópicos, no deben perder ni un segundo, el mundo de las espiritualidad es necesario para que nos abra el pensamiento y podamos estar conectados con otras realidades, entender sobre nuestro origen y sobre la verdadera misión que tenemos en el universo: Vivir.
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