Introducción:
Este mes las dos cartas que sugiere el mazo de tarot angélico son: los ángeles de la luz roja y los ángeles de la adaptación.
Astrológicamente nos encontramos con Mercurio saliendo de su sombra post-retrógrada para ponerse directo. Para aquellos que no lo saben, la retrogradación de un planeta implica que el mismo se encuentra en un aparente desplazamiento hacia atrás de su órbita, visto desde la tierra.
Pasada la retrogradación estamos en un momento de claridad respecto a una o más situaciones puntuales de nuestra vida. Mercurio recorrió dos veces los mismos grados matemáticos. Llevado al ámbito cotidiano, asuntos que transcurrieron entre mediados de noviembre y principios de diciembre de 2017 fueron revisados. Tuvimos así un momento de reflexión, en el cual pensamos acerca de eventos transcurridos anteriormente. Por eso, ahora que vemos aquella situación con claridad podemos elegir cuál es la mejor forma de orientar nuestras acciones.
A su vez, esta temporada Mercurio en Sagitario tendrá importantes alineaciones con el Nodo Norte, por lo cual nos queda claro que esta movida estará destinada a que abramos los ojos y evolucionemos para ser una mejor versión de nosotros mismos.
Este proceso que coincide con el fin del año 2017 y el comienzo de un nuevo año nos da la posibilidad de mirar hacia adelante con una perspectiva completamente distinta: más clara, más centrada y más concreta. Nos ayuda a empezar el 2018 siendo más fieles que nunca a nosotros mismos.
Ángeles de la Luz Roja:
El objetivo principal de estos ángeles es darnos ánimo para que nos atrevamos a ser nosotros mismos y así poder alcanzar nuestros objetivos. La fuerza está adentro nuestro, tenemos en nosotros todo lo que necesitamos. Solo hay que ser conscientes de ello y tener confianza en nosotros mismos.
Los ángeles de la luz roja representan seres luminosos portadores de fuerza, intensidad y pasión. Es la carta de la determinación y del propósito definido, que nos anuncia que estamos en la dirección correcta y nos da el impulso para ir por aquello que deseamos.
La figura del león nos habla de una identidad clara y un paso firme y seguro. Este personaje nos enseña que de nada sirve aferrarnos al pasado, sino que es fundamental ir hacia adelante confiando en nuestra propia capacidad de acción ya que de esta forma lograremos nuestros objetivos.
Su mensaje nos dice “Tienes el poder para abrir caminos, no mires atrás”. De esta forma nos dota de la capacidad para actuar en el mundo y nos brinda su energía activa y pujante, necesaria para penetrar la realidad sin dudar ni pensar en el pasado. A ellos les podemos pedir fuerza y convicción para avanzar y profundizar en el propio camino; que nos ayuden a olvidar experiencias pasadas y a recuperar nuestro fuego sagrado personal.
Oración: “Por causa de un dolor o una desilusión, un león yace dormido naufrago del estupor. Ángeles de la Luz Roja ¡despertarán su furor!
Ángeles de la adaptación:
El objetivo principal de estos ángeles es anticiparnos una transformación que se dará en todas nuestras relaciones. Desde el plano laboral hasta en nuestros vínculos con el mundo exterior; es decir con nuestros amigos, familia, pareja. Ellos nos sugieren que aceptemos estos cambios que se dan y nos adaptemos a ellos sin aplicar ningún tipo de resistencia.
Su mensaje es “Adáptate sin resistir”, nos enseñan a actuar como el agua del río, que cuando encuentra algo nuevo a su paso se adapta a su forma. El agua avanza sin dificultad. Nos explican que la verdadera fuerza radica en ser ágiles y flexibles, en lugar de luchar contra el obstáculo.
Esta carta también indica que no hay por qué temer ante los cambios en el entorno. La vida va cambiando momento a momento al igual que lo hacemos nosotros. Hoy no somos los mismos de ayer ni mañana seremos quienes somos hoy. Debemos fluir junto con la vida. De esta forma nos adecuaremos sin problema a las situaciones que nos toquen vivir.
A los ángeles de la adaptación les podemos pedir ductilidad para adaptarnos a las situaciones inesperadas que surgen en nuestro camino. Que nos otorguen la capacidad de aflojar nuestras estructuras que muchas veces nos limitan y nos apartan de la vida. También les podemos pedir paciencia para llevar adelante nuestros proyectos independientemente del entorno.
Oración: “Así como el junco cede ante la fuerza del río, flexible y ágil has de ser en el invierno y en el estío. La adaptación traerá felicidad en días de calor y de frío”.
Conclusión:
Nos dirigimos entonces a los Ángeles de la luz roja, para que nos aporten la fuerza que necesitamos a lo largo del camino, y a los Ángeles de la adaptación para que nos ayuden a fluir con el mismo, sin resistir a los cambios.
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